Powered By Blogger

domingo, 12 de octubre de 2014

Uno ve, lo que quiere ver.

Llego a esta habitación, y todo lo que imagino que haces, no ocurre.
Me saco el bolso y miras mientras lo hago, no es cierto.
Luego voy hacia donde tu estás, te tomo de la mano y tu igual a mi como diciendo, gracias por venir a verme y acompañarme, pero no, no dices nada.
Pasan los minutos y las horas, te miro a los ojos, y de pronto.. tu ves los míos y entablamos una conversación de a dos, en la que nos sentimos y conectamos, en donde ahora puedo decir que las miradas dicen más de mil palabras, donde nos contamos cómo nos va y te digo que te extraño y mil veces que te amo.
De pronto, estamos callados, ninguno dice nada, y me acerco a tus oídos, te canto millares de veces que te amo, pero no me oyes. Entonces, prefiero callar, y cerrar los ojos contigo por largas horas...creo que es lo único que hacemos juntos.
Llega la hora de irme, tomo mis cosas, y se me es difícil dejarte. En el camino, me doy cuenta de que tu no estabas ahí mirándome, tomándome de la mano, agradeciéndome o escuchándome. Nada de lo que creí fue cierto, pero si lo fue lo que sentí, y tendré que conformarme con eso. Así que con eso, seré feliz. Así que con eso viviré.
y por mil y una ves, TE AMO.




¿Que es mi amor por ti?

¿Qué es mi amor por ti?, te propongo que algún día nos encontremos y que veamos el cielo estrellado para que en su pavorosa inmensidad nos digamos cuanto nos amamos y extrañamos y que descubramos que las estrellas, que aunque sabemos que están muertas, brillan todavía como mi amor por ti mueve el sol y a las otras estrellas.



P.D: a mi abuelo.